Inusual como es, el lanzamiento de campaña tras campaña del Banco Agrícola sólo es una muestra de su desesperación por cambiar la percepción que los salvadoreños tenemos de este banco.
Como sabemos, este banco ha abusado por años de sus clientes, pero este año en particular sucedió un fenómeno mediático que hizo la diferencia: la denuncia pública de los abusos trascendió a las redes sociales, y el mismo Presidente de la República y otros funcionarios hicieron eco de las denuncias de los abusos parando en seco a dicho banco.
A raíz de estas publicaciones se conoció también que el Banco Agrícola está entre los más denunciados ante la Superintendencia del Sistema Financiero y la Defensoría del Consumidor por los cargos abusivos de diferente tipo a los cuentahabientes.
Como bien recordará el lector/a, trascendió que este banco había descontado diversos montos a los usuarios de los USD$300.00 que otorgó el gobierno para palear la situación económica ocasionada por la pandemia, de igual manera y cínicamente descontó de los USD$150.00 que otorgó el gobierno a los empleados de 1ª línea que atienden la pandemia, habiéndoles dado plazo de 24 horas el Presidente de la República para devolver lo descontado a los cuentahabientes.
Estos hechos no han caído al olvido, ni las constantes campañas mediáticas del Banco Agrícola van a lograr que la población olvide facilmente la perversa intención del banco de aprovecharse de la pandemia para tomar dinero de las cuentas de los salvadoreños.
Hacemos un llamado a las autoridades de la Superintendencia del Sistema Financiero y la Defensoría del Consumidor para que asuman su responsabilidad y sancionen al Banco Agrícola.
Lo que olvidan sus ejecutivos de Banco Agrícola, es que la imagen de un banco se cimenta en la confianza y la honestidad, más que en campañas de publicidad.
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