El abismo entre clases es uno de los temas principales de esta edición del FSM, coordinado por México bajo el título: ¿Cuál es el mundo que queremos hoy y mañana?
La pandemia de Covid-19 impone hoy la lucha contra la desigualdad social en el mundo y la necesidad de un nuevo modelo económico tras la crisis sanitaria que deja a la población pobre cada vez más vulnerable.
Así lo manifestó el brasileño Ode Grajew, fundador del Foro Social Mundial (FSM), a propósito de la vigésima edición que, desde el 25 de enero, se realiza de forma virtual hasta el día 31.
Grajew afirmó que el modelo económico global se alimenta de tal desigualdad y ‘frente a la pandemia y su escasez, los súper ricos tienen la mayor parte del poder político, entonces someten las decisiones a sus intereses, dejando sus recursos más protegidos’.
Al respecto, Oxfam Brasil (una confederación internacional formada por 19 organizaciones no gubernamentales que realizan labores humanitarias en 90 países) señala que los mil mayores multimillonarios del mundo consiguieron durante la pandemia recuperar sus pérdidas financieras.
Sin embargo, advirtió, los más pobres tardarán al menos 14 años en recuperarse.
Durante una entrevista con Radio Brasil Atual, el revolucionario empresario insistió en que la pandemia abrió la enorme desigualdad en el mundo, que tiene sus raíces en el modelo capitalista neoliberal, desconectado de los derechos humanos.
Gobernado por el político ultraderechista Jair Bolsonaro, Brasil vive un escenario inédito desde la creación del foro. ‘Bajo un gobierno autoritario, los brasileños pueden buscar cambios para el país en el FSM’, apuntó.
En la evaluación del creador del cimero encuentro, la conexión del gigante suramericano con el autoritarismo también está relacionada con el aumento de la desigualdad social.
‘A lo largo de los años, hemos infravalorado el tema de la desigualdad, responsable del origen de los regímenes autoritarios’, explicó.
Refirió que ‘con 200 mil muertos y amenazas del presidente (Bolsonaro), estamos viendo una movilización social para reaccionar ante esta situación en Brasil’.
Otra agenda que debe ser discutida en el evento, al analizar el escenario nacional, es el regreso del país al Mapa del Hambre, tras el golpe parlamentario judicial contra Dilma Rousseff que la apartó del poder en 2016.
‘Nos costó muchos años, fueron necesarias varias acciones y políticas públicas, para que el país saliera del Mapa del Hambre’, recordó Grajew.
Aseveró que ‘somos uno de los países más ricos del mundo, lo que hace que nuestra desigualdad y nuestra hambre sean más humillantes. Tenemos tantas riquezas, tantos recursos para alimentar a nuestro pueblo, que eso nos entristece’, lamentó.
El abismo entre clases es uno de los temas principales de esta edición del FSM, coordinado por México bajo el título: ¿Cuál es el mundo que queremos hoy y mañana?,