Nuevamente, en la jornada de Paro Nacional en Colombia, la situación en Popayán se salió de control con una serie de disturbios y acciones violencias. Monseñor Sánchez llama a un diálogo abierto y constructivo, alejado del vandalismo
Por: Alina Tufani
“Queridos jóvenes, los queremos vivos, los queremos sanos, los queremos produciendo la transformación de este país, de este Cauca”. Estas las palabras de monseñor Omar Sánchez, arzobispo de Popayán en un videomensaje en el que llama a los manifestantes y a las fuerzas públicas, a frenar la violencia, los actos vandálicos y trabajar por un diálogo constructivo y abierto.
“Nos duelen los jóvenes heridos, nos duelen los policías heridos, nos duelen todas las personas que han sido lesionadas y valoramos enormemente el sentido crítico y el interés de nuestros estudiantes y jóvenes por un país distinto”, expresa el arzobispo.
Desde el pasado 14 de mayo, la situación generada durante las protestas, especialmente, tras la muerte de dos jóvenes manifestantes y la denuncia de violación contra una joven de 17 años, han exacerbado los ánimos entre los manifestantes. Durante el Paro Nacional convocado el pasado miércoles en todo el país, la situación en Popayán se salió de control. La jornada de protestas en la que participaron miles de personas de diferentes organizaciones terminó con disturbios y fuertes confrontaciones con la Fuerza Pública en distintas zonas de la ciudad que incluso llegaron a afectar a los pacientes y al personal médico del Hospital Universitario San José de Popayán.
En este contexto, monseñor Sanchez lamenta los hechos violentos que se están registrando, y en particular, se solidariza con las familias de los jóvenes fallecidos Sebastián Quintero y Alison Ugus. Si bien el prelado valora la capacidad y el impulso que los jóvenes están aportando a la transformación de la sociedad y la construcción de un mejor futuro, insiste en la necesidad de frenar la violencia y el vandalismo. El diálogo – sostiene- “es lo único que puede hacernos construir positivamente”.
“Desde Popayán, queremos invitarlos a un diálogo constructivo y abierto, y esperamos que podamos los adultos saberlos interpretar. Y quiero pedir, en nombre de Popayán y del Cauca, y de sus gobernantes, al gobierno nacional, que se acerque al Cauca que venga a Popayán y abra una mesa efectiva de diálogo”, reitera el prelado al final de su video mensaje.
Tomado de Vatican News