Desde 2015, el Gobierno alemán había estado trabajando en un acuerdo de justicia reparativa con el país africano y en unas disculpas por la matanza de las etnias hereros y namas.
El ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Heiko Maas, fue el encargado de anunciarle al mundo que su país reconocía haber perpetrado un genocidio contra las poblaciones de las etnias hereros y namas en Nambia entre 1884 y 1915, durante el periodo colonial de la Alemania Imperial.
Las fuerzas coloniales alemanas, al comando del general Lothar von Trotha, ordenaron el exterminio de por lo menos 70.000 personas y emplearon técnicas como matanzas en masa, exilio al desierto, en donde miles murieron de sed, y campos de concentración.
“Con el punto de vista actual, hoy calificaremos estos acontecimientos de lo que son: un genocidio”, dijo Maas en un comunicado.
La matanza de la población de hereros y namas entre 1904 y 1908 es considerada por los historiadores como “el primer genocidio del siglo XX”, y había mucha presión sobre el Estado alemán para examinar su pasado colonial y reparar a las víctimas.
“Durante mucho tiempo nos hemos hecho la ilusión de que no habíamos ocasionado demasiado daño, que la época colonial fue demasiado corta como para haber causado grandes estragos”, señaló Michelle Müntefering, secretaria de Exteriores de Alemania.
El colonialismo alemán fue durante mucho tiempo un problema que jugó un escaso papel en la política nacional. Desde 2015, cuando Alemania reconoció que las atrocidades cometidas allí podían ser tipificadas como un genocidio, el Gobierno ha estado trabajando en un acuerdo de justicia reparativa con el país africano y en unas disculpas, lo cual se convierte en un gran precedente en todo el mundo. En 2019, el Parlamento alemán utilizó ya por primera vez la palabra “genocidio” para referirse a la masacre en Namibia.
Maas habló este viernes de entregar 1.100 millones de euros a Namibia en ayudas para el desarrollo, como parte de la reparación a este país. Esto marca el cierre del acuerdo entre ambos países en el que se trabajó durante los últimos cinco años.
“En un gesto de reconocimiento de los inmensos sufrimientos infligidos con el que el país va a apoyar la reconstrucción y el desarrollo en Namibia”, dijo Maas, quien precisó que, en términos jurídicos, esta reparación no se trata de una “indemnización’’.
La suma anunciada por Alemania será entregada por un periodo de 30 años y no será entregada de manera individual, aunque pide beneficiar a los descendientes de las dos poblaciones masacradas.
Tomado de El Espectador