Un estudio científico demostró que dejar de fumar luego de un diagnóstico de cáncer de pulmón disminuye la progresión de la enfermedad, informó hoy una fuente especializada.
Según la revista Annals of Internal Medicine, cuando se abandona este hábito las células no pequeñas en fase inicial pueden ralentizar el avance de la dolencia e incluso reducir la mortalidad. Los participantes fueron entrevistados al inicio del estudio para conocer sus antecedentes médicos y de estilo de vida, incluidas las características del tumor.
Luego se les chequeó durante de sieteaños para registrar cualquier cambio en su conducta de fumar, los tratamientos y el estado de la enfermedad.
De las personas que fumaban cuando se les diagnosticó cáncer de pulmón, menos de la mitad dejó de fumar y muy pocos recayeron.