La mayoría de la población en El Salvador considera deficiente el desempeño de las autoridades de seguridad en relación con los casos de desapariciones que arrastra el país desde el siglo pasado.
Así lo afirmó una encuesta en línea publicada por un medio local y que solo preguntó sobre la evaluación de ese tema.
La interrogante fue respondida por mil 425 personas, de las cuales el 77 por ciento dijo que la gestión del problema es deficiente, mientras un 16 por ciento representó a los que votaron aceptable y un siete por ciento manifestó no conocer el trabajo de las autoridades en ese campo.
El tema retomó actualidad en los últimos días cuando organizaciones de derechos humanos junto a familiares presentaron a la Fiscalía General de la República (FGR) un álbum fotográfico de 43 personas reportadas como perdidas, con el fin de que investigue los casos.
El libro incluye a individuos de los que se desconoce su paradero desde el 27 de agosto de 2007 hasta el 13 de septiembre de 2022, y solo contempla casos de los departamentos de San Salvador, La Libertad, Sonsonate y Santa Ana, en edades que oscilan entre 14 y 45 años.
La iniciativa impulsada por el Bloque de Búsqueda de Personas Desaparecidas intenta que la FGR intensifique las pesquisas para ubicar el paradero de esas personas, atender con dignidad y respeto a las familias de las víctimas, y realizar un mapeo de los posibles cementerios clandestinos existentes en el país.
Los casos son una constante en las últimas décadas y en su mayoría se atribuyen a las acciones de los grupos de pandillas pero también son delitos cometidos por otras estructuras de crimen organizado y por particulares, en este último caso, en mayor proporción se trata de feminicidios cometidos por parejas o personas conocidas de las víctimas.
En el pasado siglo y desde 1978 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos documentó numerosos casos de desapariciones durante la guerra.
La Comisión de la Verdad hizo un estimado conservador de cinco mil 500 personas extraviadas pero otros grupos agregan unos miles más al cálculo.
De acuerdo con cifras oficiales la tasa de desaparecidos por cada cien mil personas en 2010 fue de 30.8, alcanzando el pico más alto en 2014 con una tasa de 65.9, que según datos bajó a 19.5 en 2020.
Según grupos defensores de los derechos humanos el estado salvadoreño sigue en deuda con las víctimas de las desapariciones forzadas del conflicto armado y las actuales. (PL)
