La acusación de EE. UU. contra los principales líderes de la MS-13 describe las negociaciones de pandillas con el jefe de la nueva megacárcel de Bukele

Osiris Luna Meza, Director General de Centros Penales

La semana pasada, en días sucesivos, el gobierno de EE. UU. y el gobierno salvadoreño emitieron comunicados de prensa sobre pandilleros encarcelados en los dos países. Una acusación penal federal recientemente revelada también describe cómo los líderes de la pandilla MS-13 negociaron con el principal carcelero de El Salvador, Osiris Luna Meza, quien ahora supervisa la nueva megacárcel de Nayib Bukele.

El jueves 23 de febrero, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos anunció que, con la cooperación del gobierno de México, había detenido a tres líderes de alto rango de la MS-13. Esos líderes de pandillas son tres de los 13 acusados ​​nombrados en una acusación de varios cargos por crimen organizado y terrorismo que se extiende desde El Salvador a través de México hasta los Estados Unidos. De los 10 acusados ​​restantes, cuatro están prófugos y seis están bajo custodia en El Salvador, que se niega a cumplir con la solicitud de extradición de Estados Unidos.

La acusación  describe la participación de la MS-13 en una plaga multinacional de delincuencia de asesinatos, asaltos, extorsión, secuestro, tráfico de personas y drogas y más. La acusación también dedica varios párrafos a describir las negociaciones entre los gobiernos de El Salvador y los líderes de la MS-13: 

31. Aproximadamente a partir de 2012, la Ranfla Nacional entabló negociaciones secretas con miembros del entonces gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (“FMLN”) de El Salvador, y el principal rival de la MS—13, la pandilla Calle 18, para ingresar en una “tregua” para reducir los homicidios en E1 Salvador a cambio de transferencias a prisiones menos seguras, mejores condiciones carcelarias, visitas conyugales, pagos en efectivo y otros beneficios y privilegios. La Ranfla Nacional también negoció con el FMLN y su partido político rival, la Alianza Republicana Nacionalista (“ARENA”), para proporcionar votos a los candidatos políticos a cambio de beneficios para la MS-13 y la propia Ranfla Nacional…. 

35. …. Luego de las elecciones presidenciales de febrero de 2019 en El Salvador, los líderes de la MS-13, incluidos los líderes de Ranfla Nacional Borromeo Enrique Henríquez, también conocido como “Diablito de Hollywood”, Elmer Canales-Rivera, también conocido como “Crook de Hollywood”, ” y RAMIREZ-VALLADERES, se reunió en secreto en numerosas ocasiones con representantes del gobierno de El Salvador dentro de las cárceles de Zacatecoluca e Izalco y en otros lugares. Estas reuniones fueron organizadas por el gobierno salvadoreño y funcionarios penitenciarios, incluidos, entre otros, el Director del Centro Penales (Prisiones Nacionales) y el Director de Tejido Social Reconstrucción (Reconstrucción del Tejido Social). Los representantes del gobierno que asistían en secreto a estas reuniones en las prisiones a menudo usaban máscaras y se negaban a identificarse cuando ingresaban a las prisiones en violación de las normas penitenciarias. Los líderes de la MS-13 fuera de la prisión también asistieron a estas reuniones dentro de las prisiones. Estos líderes de la MS-13 también usaban máscaras y camisas de manga larga para ocultar sus tatuajes e identidades, se les proporcionaron tarjetas de identificación oficiales que los identificaban como agentes de inteligencia o agentes del orden, y eran escoltados por funcionarios penitenciarios salvadoreños. DE LA CRUZ coordinó los esfuerzos de los líderes y miembros de la MS-13 fuera de prisión involucrados en estas negociaciones. DE LA CRUZ brindó instrucciones y orientación en nombre de la Ranfla Nacional a los líderes de la MS-13 fuera de prisión que participaron en las negociaciones. Los funcionarios penitenciarios también facilitaron las transferencias temporales de los líderes de la MS-13, incluido Henríquez, a hospitales civiles para recibir “tratamiento” por condiciones médicas inexistentes. 

36. Como parte de estas negociaciones secretas, la Ranfla Nacional, la Ranfla en Ias Calles y la Ranfla en los Penales negociaron con los funcionarios gubernamentales de alto nivel beneficios económicos, control del territorio, condiciones carcelarias menos restrictivas que permitirían a la Ranfla Nacional, la Ranfla en los Penales y otros líderes de la MS-13 mayor comunicación para mantener el control sobre la MS-13, y cambios legislativos y judiciales, que incluyen, entre otros, sentencias de prisión reducidas que resultarían en la liberación anticipada de los líderes de la MS-13. Además, la Ranfla Nacional exigió que el gobierno de El Salvador se negara a extraditar a los líderes de la MS-13, incluida la Ranfla Nacional, a los Estados Unidos para su enjuiciamiento. A cambio, los líderes de la MS-13 acordaron reducir el número de asesinatos públicos en El Salvador, lo que benefició políticamente al gobierno de El Salvador, al crear la percepción de que el gobierno estaba reduciendo la tasa de homicidios. Cuando de hecho, los líderes de la MS-13 continuaron autorizando asesinatos donde los cuerpos de las víctimas fueron enterrados o escondidos. Los líderes de la MS-13 también acordaron usar la influencia política de la MS-13 para dirigir a miembros de la MS-13, amigos y familiares de miembros, y residentes de barrios bajo el control de la MS-13, para apoyar a los candidatos de Nuevas Ideas en las elecciones de 2021 para la Asamblea Legislativa de El Salvador. Asamblea.

37. El 14 de enero de 2021, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos reveló una acusación en el Distrito Este de Nueva York que acusaba a 14 miembros de la Ranfla Nacional, incluidos Henríquez y Canales-Rivera, de delitos de terrorismo, y anunció que explorar opciones para extraditar a la Ranfla Nacional a Estados Unidos. El entonces Fiscal General de El Salvador anunció su apoyo a las extradiciones de la Ranfla Nacional a los Estados Unidos para su enjuiciamiento. En 2021 y 2022, el Departamento de Justicia presentó solicitudes formales de extradición para doce de los acusados ​​de Ranfla Nacional. La Ranfla Nacional y otros líderes de la MS-13 exigieron que el gobierno de El Salvador se negara a extraditar a los acusados ​​de la Ranfla Nacional y otros líderes de la MS-13 acusados ​​de delitos a los Estados Unidos. …

39. El o alrededor del 4 de febrero de 2021, la Organización Internacional de Policía Criminal (“INTERPOL”) publicó una Notificación Roja para Canales-Rivera y fue arrestado en esa Notificación Roja en El Salvador, el o alrededor del 5 de junio de 2021. El o sobre el 22 de julio de 2021, Estados Unidos solicitó formalmente la extradición de Canales-Rivera. Posteriormente, el gobierno de El Salvador liberó a Canales-Rivera de la custodia, a pesar de la Notificación Roja de INTERPOL y la solicitud de extradición pendiente de los Estados Unidos. 

Esas denuncias sobre sucesivos gobiernos de El Salvador, incluido el actual gobierno de Nayib Bukele, negociando con líderes de pandillas dentro y fuera de prisión no son nada nuevo. Han sido reportadas por El Faro y otros sitios de periodismo de investigación durante años. Pero la acusación sin sellar ahora otorga el visto bueno del Departamento de Justicia de EE. UU. a las acusaciones.

Como es ampliamente conocido hoy, esas negociaciones secretas llegaron a su fin en marzo de 2022, cuando la MS-13 lanzó una ola de homicidios, y Nayib Bukele respondió con su Estado de Excepción aún vigente y la guerra contra las pandillas.

Esa guerra contra las pandillas, y su captura de 64.000 presuntos pandilleros o colaboradores, incluye la apertura de la prisión más grande de América (y tal vez del mundo). Al día siguiente de que Estados Unidos anunciara la captura de los líderes de la MS-13, el gobierno de Bukele emitió sus propios comunicados de prensa sobre el traslado de pandilleros a la nueva prisión.   

Los comunicados de prensa comenzaron, como de costumbre, con un tuit de Bukele:

Hoy en la madrugada, en un solo operativo, trasladamos a los primeros 2.000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT). Esta será su nueva casa, donde vivirán durante décadas, mezclados, sin poder hacer más daño a la población. Continuamos…

Las imágenes provenientes de la maquinaria mediática del gobierno salvadoreño estaban cargadas con imágenes de reclusos muy tatuados, vestidos solo con pantalones cortos blancos, rodeados y arreados en poses de sumisión. No se debe esperar que el régimen de Bukele publique imágenes de las mujeres, los menores o los inocentes sin tatuar arrastrados en «Estado de Excepción» pero sometidos al mismo trato y condiciones.

Más allá del hecho de que los comunicados de prensa de los gobiernos de EE. UU. y El Salvador de la semana pasada tratan sobre pandilleros de la MS-13 de El Salvador que están bajo custodia, hay otro hilo común. El hombre a cargo del sistema penitenciario de El Salvador con su nueva megacárcel es Osiris Luna Meza . Se le nombra en el párrafo 35 de la acusación como uno de los funcionarios del gobierno que organizó reuniones en prisión para negociar con la MS-13. Él y Carlos Marroquín, el Director de Reconstrucción del Tejido Social que también se menciona en la acusación, están sujetos a las  sanciones de la Ley Global Magnitsky por parte del Departamento del Tesoro de los EE. UU. por actos de corrupción, incluidas las negociaciones con pandillas y un plan de Luna Meza para malversar millones del sistema de comisaría penitenciaria.    

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