La soledad o el aislamiento social se relacionaron con un mayor riesgo de muerte prematura, manifestó un equipo de científicos. Agregaron que las personas que padecían enfermedades cardiovasculares o algunos tipos de cáncer y estaban socialmente aislados, tenían más probabilidades de morir prematuramente.
«Esos resultados controvertidos podrían deberse a que las investigaciones solo se han centrado en un grupo o región específicos», declaró Turhan Canli, profesor de neurociencia integradora del Departamento de Psicología de la Universidad Stony Brook de Nueva York. Canli no participó en el estudio.
El riesgo de la muerte prematura
«Las personas que se sienten aisladas o solas tienden a tener hábitos poco saludables, como fumar, consumir alcohol, llevar una dieta inadecuada o hacer poco ejercicio», señaló.
«Las personas que se sienten solas, pero no aisladas, padecen estrés mental, pero pueden ser resistentes a él gracias a sus relaciones sociales, incluso si esas conexiones no son del todo lo que uno quiere que sean», opinó el primer autor del estudio, Fan Wang, profesor de epidemiología de la Universidad Médica de Harbin en China.
Ampliación de las conexiones sociales
«Piense en mantener una red social como en cualquier otra actividad que promueva la salud: hacer ejercicio con regularidad, comer bien, cuidarse. Haga de sus relaciones una prioridad, (…) piense en formas de participar en actividades que puedan exponerle a nuevos círculos de personas afines», agregó Canli.
«Es fundamental realizar las conexiones con la ayuda de familiares y de la comunidad. El sistema sanitario debe desarrollar métodos para identificar el aislamiento y la soledad en los pacientes, de modo que los profesionales de la salud puedan proporcionar la ayuda adecuada», expresó.
Fuente: Sputnik