Por tercer año consecutivo, el Foro Permanente para el Desarrollo Integral del Centro Histórico de San Salvador, del cual el Ministerio de Cultura es miembro fundador, celebró esta semana el Festival Barrial, dedicado en esta edición a los 50 años de FUNDASAL.
El festival se desarrolló en la Plaza Gerardo Barrios del centro histórico de la capital, como una iniciativa que responde a la necesidad de visibilizar y resaltar los aspectos positivos del lugar, como los emblemáticos edificios y monumentos, así como manifestaciones de la identidad nacional, juegos y bailes tradicionales, comidas típicas y más.
“El centro hace veinte años se veía únicamente como un centro comercial, como un gran mercado, la idea es cambiar eso, es decir, dentro del centro histórico tenemos una gran riqueza de arquitectura patrimonial, de expresiones culturales y de tipo religioso; se trata de que todas estas manifestaciones artísticas, así como la riqueza patrimonial, sea visibilizada, que el centro sea el corazón de la ciudad, que tenga vida propia”, explicó Hugo Barrientos, técnico de la Dirección de Patrimonio Cultural y Natural.
Como parte del festival, se desarrollaron presentaciones de danza folclórica, exposiciones de artesanías, un taller de elaboración de piscuchas, así como recorridos por las instalaciones del Palacio Nacional dirigidos por técnicos de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Natural y estudiantes de la Universidad de El Salvador, a los cuales asistieron más de 250 personas.
“Este año tenemos la modalidad de horarios definidos y grupos con guías especializados. Hemos capacitado a un grupo de jóvenes de la Universidad de El Salvador para que nos apoyen con los recorridos dentro del Palacio Nacional”, expresó la arquitecta Nolvia Ventura, de la Dirección de Patrimonio Cultural y Natural.
William Murcia, uno de los participantes en los recorridos, aseguró: “Nos mostraron los salones, nos explicaron los inicios del Palacio Nacional, cuál fue la iniciativa gubernamental para desarrollar el mismo, así como todos los embates que ha tenido la infraestructura, el tipo de restauraciones que se han llevado a cabo y un factor importante es ver que se conservan los salones amarillo, rojo y azul, que en su momento determinado es donde estaba la Asamblea Legislativa; buen recorrido y muy importante para el conocimiento de la población”.
